Las obras para arreglar el dique del distrito de Cartagena de Santa Cruz arrancaron este viernes 10 de agosto con casi dos meses de atraso. Los trabajos debieron iniciar el 31 de mayo anterior.
La necesidad de repararlo está desde la tormenta Nate, que golpeó la provincia en octubre de 2017 y afectó la obra. En ese momento, la Comisión Nacional de Emergencia (CNE) reparó los daños, pero solo temporalmente.
De acuerdo con la alcaldesa del cantón, María Rosa López, Harmer, la empresa concesionaria de esta obra, justificó que los tubos que necesitaban para los arreglos no estaban disponibles en el mercado, por lo que debieron solicitar su fabricación y eso atrasó la fecha de inicio.
López fue enfática en que ese atraso será sancionado, pues el contrato de trabajo con la compañía ampara al gobierno local a hacerlo. El departamento legal de la municipalidad definirá esa sanción.
“Desde luego que existirá su debido proceso en este tema. La empresa ya sabía que si existían atrasos de este tipo debían responder”, comentó la alcaldesa. El tipo de sanción no fue detallada por López.
Harmer fue la única empresa que se presentó ante la municipalidad de Santa Cruz como interesada en llevar a cabo los trabajos, por lo que el gobierno local les concedió la obra. Las reparaciones tienen un costo estimado de ¢17,5 millones.
La empresa tendrá 30 días para concluir las reparaciones, según la municipalidad.
En sesión de concejo municipal, los directivos del Colegio Técnico Profesional de Cartagena manifestaron la necesidad de reparar el dique, pues afirmaron que las corrientes de agua, que no ataja la obra, afectan la entrada del centro educativo poniendo en peligro la vida de los alumnos.
Comentarios