Regional, Nosara

Carta al editor – Algunos detalles financieros sobre la biblioteca

This post is also available in: English

Todo el dinero que entra a la biblioteca para proyectos especiales o para el presupuesto anual proviene de donadores privados. Muchos de estos donadores son residentes parcialmente o tiempo completo de Nosara (estadounidenses, canadienses, alemanes, suizos, austríacos, italianos y franceses); sin embargo, también se reciben donaciones de los turistas que pasan acá sus vacaciones, especialmente aquellos que han venido con anterioridad, así como de personas que viven en los Estados Unidos que creen que una biblioteca es esencial para el crecimiento y el desarrollo comunal. No se reciben fondos del Gobierno de Costa Rica: ni ahora, ni antes.

Por cada dólar recibido para el presupuesto anual, el 61% se usa para pagar los salarios de los siete empleados de la biblioteca: el bibliotecario, su asistente, el conserje, el jardinero, el contador local, el contador en San José y un abogado para la protocolización de la Fundación cada año. Los servicios básicos como la electricidad, el teléfono, el agua, entre otros, gastan 10%. Productos consumibles como el papel, la tinta para impresoras, productos de limpieza, por mencionar algunos, se llevan el 2.5%. Programas especiales como el club de adultos mayores, eventos especiales en días feriados, cursos de actualización de habilidades para los empleados y demás actividades especiales gastan el 3%. El 22.5% restante se utiliza para el mantenimiento del edificio, reemplazar y reparar el aire acondicionado, actualizar las computadoras, pequeñas mejoras, reemplazar ventiladores y libros.

Algunos de los cursos que la biblioteca provee contribuyen con una pequeña cantidad de dinero a las arcas, pero cada curso debe ser subsidiado por la biblioteca, por lo que el ingreso nunca es suficiente para cubrir el costo de la actividad. Por ejemplo, cada año durante el mes de enero, cuatro estudiantes universitarios vienen desde Middlebury, Vermont, a dar clases de inglés. El curso el año pasado ofreció 24 horas de lecciones a ¢5.000 por persona; 63 asistieron. La librería ingresó ¢315.000, pero los costos fueron los siguientes: ¢50.000 para el transporte del supervisor del curso; ¢166.000 por servicios básicos como internet, electricidad, etc.; ¢35.000 en limpieza, papel blanco y demás herramientas audiovisuales que necesitaron los profesores. Además, se pagó el equivalente a ¢113.000 colones en salario a dos empleados de la biblioteca que dedicaron parte de su tiempo a ayudar alumnos y profesores. Y aún no hemos mencionado a los profesores que vinieron de EEUU a impartir el curso. Ellos pagaron sus propios tiquetes aéreos, y su propia comida y apartamento por un mes. ¡Su contribución siempre es enorme!

Actualmente, la librería ofrece lecciones de manejo básico de computadoras. Estas clases cuestan ¢3.000 colones al mes por 16 horas de lecciones: un costo de menos de ¢200 por clase. El costo de la biblioteca continúa, especialmente al usarse electricidad extra. El profesor de estas clases, en este ejemplo, dona su tiempo; no recibe ninguna clase de remuneración.

El objetivo de la biblioteca con todos estos proyectos es ofrecer clases que provean a los ciudadanos con las herramientas para mejorar sus vidas. No existe, ni ha existido antes, un deseo por generar dinero: las clases son económicas para que nadie en el pueblo pueda decir que no pueden aprender inglés, computación o cualquier otra materia, porque no puede pagarlas. La Junta de Directores de la Biblioteca, así como su personal, están comprometidos a continuar las experiencias educativas que beneficien a toda la comunidad local.

El año pasado, más de 14,000 personas atravesaron las puertas de la Biblioteca David Kitson. El número aumenta cada año: sabemos que es así porque la biblioteca cumple bien su trabajo a la comunidad. Estamos más que dispuestos a contestar las preguntas sobre nuestros programas y servicios, así como de oír ideas y sugerencias para aprender qué mejorar y qué más podemos hacer. Invitamos a nuevas visitantes y usuarios a aprovechar de todo lo que la biblioteca ofrece.  

Comentarios