La experiencia de una Nicoyana
Ahora el 5 de septiembre ya cumplimos un año después del terremoto. Fue algo tremendo. Yo nunca había experimentado una cosa así. Yo tengo horror a los temblores y mucho mas a un terremoto. Yo jamás tenía idea de que era eso. Yo sentí que mi casa me había caído encima. Desde ese momento yo quede traumatizada. Tuve que ir a buscar ayuda profesional porque no pude dormir. Se acuesta uno y se siente que le va a venir otro jalón de esos. Pero allí estamos pidiendo a Dios que eso no nos vuelva a afectar.
Mi casa quedó con daños. Habían dos paredes bastantes afectadas. De allí se oyeron las noticias que Doña Laura Chinchilla iba inyectar ciertos fondos a las municipalidades para darnos ayuda económica para que nosotros nos apersonáramos ante la municipalidad para recibir todo el apoyo tanto económico como técnico.
Yo doy gracias a la vicealcaldesa Doña Adriana Rodríguez que esta a cargo de ese proyecto. Yo fui a donde ella y fue algo inmediato. Ella de inmediato me atendió y empezó a hacer toda la documentación. Fue de forma inmediata que a mi me dieron la ayuda económica. Le doy gracias a ella y a la presidenta porque somos un montón de familias afectadas.
La municipalidad nos dio ya toda la ayuda económica. Yo empecé a buscar las personas idóneas para hacer el trabajo. Aquí vinieron ingenieros del Ministerio de Salud y la ingeniera de la Municipalidad, Melisa Salas. Me quedó nueva mi casa. Quedó totalmente reparada.
Yo aprendí muchísimo. Aprendí que hay que hacerle frente a todo y siempre y cuando a nosotros nos esta brindando ayuda el gobierno a través de la municipalidad, uno tiene que sentirse bien. Yo me siento muy satisfecha.
Uno no tiene palabras para decir las cosas. Uno jamás espera una cosa de esas. Queda uno con un nerviosismo. Espero en Dios que no nos vuelva a suceder una experiencia como esa.
Un alto agradecimiento al gobierno de Doña Laura Chinchilla Miranda por todo el apoyo económico y a la vicealcaldesa y a la ingeniera que se llama Melisa Salas. Eso es lo que necesitamos, que siempre estén los funcionarios abiertos a darnos la mano y darnos el apoyo necesario.
Argentina Vega
San Martin de Nicoya
Un relato de Nosara
El terremoto del 5 de septiembre del 2012 fue para toda mi familia algo único que nunca creímos que tanta adrenalina descarga. Cuando amaneció, era una mañana como todas las otras. Cuando empezó el temblor, yo estaba con mi hija de 9 años y mi abuelo de 87 años en la cocina de leña y mi hija de 3 años jugaba en el portón de la casa. Mi otra hija de 16 años estaba dentro de la casa y yo gritaba que saliera. Lo hice como cuatro veces pero nunca salió. Le dije a Dios que me preparara para ver las cosas de una posible pérdida humana pero él fue tan bello que protegió a mi hija con su mano poderosa y me hizo reconocer que él tenía el control de todo.
Lo que nosotros perdimos no fue nada, solo fue lo material como la casa y algunas cosas. La ferretería de Nosara nos dio un bono de 250 mil colones y de la cena en Rancho Tico nos dieron 280 mil colones. Construimos un departamento en otro lote que tenemos para vivir porquepor la casa no vamos a poder esperar. No hemos tenido los recursos para botar la casa que quedó inhabitable. Allí está todavía.
Anabelle Gutierrez Espinosa
Nosara
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