Como todo un guanacasteco, Manuel Obregón, Ministro de Cultura rindió su informe de labores entre retahílas y versos, durante el Concejo de Gobierno el pasado 24 de julio en la ciudad de Filadelfia.
Obregón subió al estrado y de entrada soltó las primeras rimas “adopto yo de raíz, el verbo guanacasteco…Y en vez de darles un seco reporte sin corazón, les hable con la sazón y el método de la retahíla”.
Dentro de las obras que citó Obregón en su informe guanacastequizado, están los trabajos de reparación en la Casona de Santa Rosa, la Iglesia de Quebrada Honda, el Puente sobre la Calle Real en Liberia, así como la creación de las orquestas y bandas del Sistema Nacional de Educación Musical (SINEM).
Con cada frase que pronunciaba Obregón, crecía el asombro y deleite de los presentes en el Salón Comunal de Filadelfia quienes con aplausos y gritos reconocieron el carisma y talento del ministro.
La Voz le invita a revivir el original discurso de Obregón:
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