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Los encargados del proyecto inmobiliario Epic Nosara colocaron en las afueras de la construcción un rótulo de la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena) con el que respaldan el aval ambiental de la obra. Sin embargo, el letrero es engañoso.
La empresa que figura como responsable del proyecto, Pacific Trust and Escrow Services, tramitó la viabilidad ambiental y recibió aprobación por parte de Setena el 31 de enero del 2024 (según la resolución N° 0135-2024-SETENA). Sin embargo, no cumplieron con un requisito clave: notificar a la institución previo al inicio de las obras, para que así Setena verificara que lo que se construye coincide con lo que se aprobó.
El proyecto es un complejo de seis villas distribuidas en cinco lotes ubicados en las cercanías de las canchas de tenis de playa Pelada, y que limita con el Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional (RNVSO).
La empresa solo necesitaba el permiso ambiental para una de las cinco fincas en las que levanta el proyecto, según el Reglamento de Evaluación, Control y Seguimiento Ambiental (Decreto N.° 4389). En las restantes cuatro fincas la obra no superaba los 1.000 metros cuadrados ni estaban en una área ambientalmente frágil y por lo tanto no debían cumplir con el requisito.
Según el expediente en Setena, el permiso ambiental otorgado a Pacific fue para la construcción de una casa de habitación de dos plantas, un rancho para eventos familiares, ante jardín, jardines, retiros y shala (espacio para practicar yoga).
La institución aprobó los permisos pero según explicó a La Voz de Guanacaste el secretario general de Setena, Andrés Cortez, “no tenía el derecho para iniciarse” porque debían notificar a la institución previo a su inicio.
Las empresas inmobiliarias Century 21 y Nosara Real Estate Agency ofrecían en su catálogo la venta de Casa Corcovado, una de las seis villas del proyecto inmobiliario de lujo, Epic Nosara.
Al obtener la viabilidad ambiental, las empresas desarrolladoras deben informar a la institución para que Setena fiscalice, mediante un regente ambiental inscrito ante Setena, que se cumplan los parámetros ambientales aprobados en la viabilidad. De lo contrario, es una obra que se levanta a ciegas.
“Si ellos empiezan a hacer otra cosa diferente (a lo planteado en la viabilidad) es el regente el que tiene que indicar a Setena”, explicó Cortez. El funcionario también detalló que, al no iniciarse la gestión ambiental, el proyecto no cuenta con la bitácora digital ni con Instrumentos de Control y Seguimiento Ambiental (ICOS). Ambas herramientas son parte del registro del desarrollo de las obras y la supervisión que debe realizar la institución ambiental.
Según el expediente de esta construcción, Pacific Trust nombró al geógrafo Luis Edén Navarro como regente del proyecto en junio del 2024.
El geógrafo aseguró a La Voz de Guanacaste que él desconocía el arranque de las obras. “Yo no sabía que había dado inicio. (…) El asunto fue que la gente la hizo [la construcción] a callado. A mí no me dijeron nada”, afirmó Edén.
Edén agregó que durante la mañana del 24 de abril, recibió una llamada del desarrollador de Epic Nosara, Steven Ferris, para pedirle que iniciara el proceso de notificación. “¿Cómo va a estar casi construida si ustedes a mí no me informaron cuando empezaba la obra”, dijo Edén que le expresó a Ferris.
El alcalde de Nicoya, Carlos Armando Martínez, prometió investigar el expediente de los permisos otorgados sin disponibilidad de agua y promete que no será tolerante ante ninguna situación irregular.
Desde el miércoles 23 de abril, La Voz de Guanacaste envió nuevamente preguntas sobre el caso vía correo electrónico y WhatsApp al representante de Pacific Trust, Steven Ferris. Sin embargo, no respondió.
El abogado ambiental, Álvaro Sagot, explicó que la bitácora y los reportes del regente son como los “ojos del Estado”.
“Una licencia ambiental [la viabilidad] no es un banderazo de salida y que se vaya y se haga lo que quiera. El consultor tiene que estar previendo e informando a Setena cada cosa que se hace en su bitácora. Tiene la responsabilidad de que no se vaya a hacer nada en contra de lo que se autorizó”, dijo.
El rótulo de Setena evidencia la aprobación ambiental, pero no le da permiso a Epic Nosara de iniciar construcción.Foto: Luis Diego Alfaro
Una sexta villa escondida de Setena y de la muni
La Municipalidad de Nicoya realizó una inspección el pasado 1° de abril en las obras de Epic Nosara, luego de que La Voz de Guanacaste revelara irregularidades en el otorgamiento de los permisos de construcción. Las obras fueron autorizadas a pesar de que el proyecto no cuenta con disponibilidad de agua para su edificación ni para su futura operación.
La Municipalidad de Nicoya clausuró Epic Nosara después de otorgarle permisos de construcción sin viabilidad hídrica.
En la visita del gobierno local, los funcionarios identificaron una sexta casa que no cuenta con el permiso de construcción correspondiente por el gobierno local, así lo detalló el informe de inspección No. MN-INSP-059-04-2025.
“En cuanto a la casa #6, esta no cuenta con los permisos constructivos del todo (…) está en obra gris, levantada sus paredes y hasta la colocación de su estructura de techo”, detalla un extracto el documento compartido por el departamento de prensa.
La sexta villa tampoco está en el radar de Setena, según consta en los expedientes enviados por la institución. Esto quiere decir que su construcción, y posible impacto ambiental, no fueron analizados por la institución a la hora de aprobar el permiso ambiental. Tampoco a la hora de considerar que las obras en los otros lotes restantes no requerían la viabilidad.
El abogado Sagot considera que si se llega a comprobar que la sexta casa está dentro del lote que obtuvo viabilidad ambiental, el desarrollador podría perder el permiso de Setena, e incluso la muni podría solicitar la demolición del inmueble.
“Un solo árbol y no haberlo puesto en la bitácora, ya solamente eso es causal de una sanción penal, civil o administrativa. Y ni hablar si lo que se está construyendo es, además, otra casa más”, concluyó.
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