El colectivo Artes Visuales busca patrocinadores para llevar a cabo la tercera edición del festival de murales Santa Cruz Vive 2018.
El proyecto tiene por objetivo pintar ocho paredes, de casas y comercios en el centro de Santa Cruz, Guanacaste y rendir un homenaje a la cultura y a la naturaleza del cantón.
Para ello, los organizadores aseguran que se requiere un total de ¢29 millones, entre mano de obra y materiales.
“Los patrocinios pueden ser económicos pero también pueden ser directamente materiales. Por ejemplo, en la edición del 2017, se nos donó toda la pintura. También la municipalidad nos colaboró con ¢6 millones”, dijo José Jackson Guadamuz, miembro del colectivo.
Los interesados en apoyar el evento pueden llamar a los números 8973-3205 o 8428-9008 para coordinar con los realizadores las donaciones.
Embellecer con arte
Positivos en que el apoyo se logrará, José Jackson explicó ante el Concejo Municipal de Santa Cruz, que ya se cuenta con las ocho paredes donadas para ser pintadas. Eso sí, una de ellas requiere de aprobación de parte del gobierno local.
“Queremos pintar la concha acústica del parque. Ya tenemos el boceto de cómo se verá. Confiamos en que la muni nos ayudará dándonos el permiso”, dijo Guadamuz.
La pintura que se pretende en el anfiteatro tendría como tema central los cuatro elementos chorotegas: el lagarto, el mono, la serpiente y el jaguar.
Blanca Baca, junto a varios vecinos de Santa Cruz pintaron este mural a un costado de la panadería Santa Clara en la segunda edición del festival en 2017.
Otras pinturas harán alusión a la música y las mascaradas, a la historia de Coopeguanacaste y a la flora de la bajura.
Se estima que el arranque de las obras sea a partir de setiembre y se extienda por cuatro meses.
“Por medio de estos murales se busca rescatar y fortalecer la identidad santacruceña al tiempo que contribuimos con el turismo. ¿Imagine la gente viniendo acá para apreciar el arte?. También se educa a los mismos ciudadanos y se destaca el talento nacional y local”, continuó el vocero.
En la edición del 2017 se pintaron 16 paredes de casas y comercios del cantón. En cada pared se contó con un director artístico, para un grupo de participantes, que dirigía la obra a partir de un boceto previamente definido.
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