Los fuertes vientos del sábado 2 y del domingo 3 de dejaron a muchos sin dormir, escuchando las laminas de zinc de los techos golpeando, aflojándose y en algunos casos hasta yéndose por el aire.
La zona más afectada fue el distrito de Nosara, donde unos 7 casas perdieron sus techos, según Montserrat Barrantes Zamora, Asistente Administrativo de la Vice-alcaldesa y Presidenta del Comité Municipal de Emergencia Adriana Rodríguez. Ella se encuentra actualmente preparando un informe para ser enviado al Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS).
Marcos Ávila, Síndico por el distrito de Nosara, dijo que el lunes 4 de marzo realizaron un inventario de los daños y que encontró cinco casas con techos dañados, así como una casa dañada en Esperanza donde un árbol cayó sobre ella. Afortunadamente, no hubo ni perdidas ni lesiones humanas.
Además, las fiestas de Garza tuvieron que ser suspendidas el domingo y el lunes debido a que los fuertes vientos en la noche del sábado destruyeron la mayor parte de las estructuras. Manuel Hernández, Presidente de la Asociación de Desarrollo de Garza, dijo que la mayoría de los chinamos de los vendedores de comida y juguetes se derrumbaron, causando la pérdida de algunos bienes.Varias estructuras metálicas se torcieron y se cayeron las vallas alrededor del redondel de toros.
Si el tiempo lo permite y los vientos se calman, los organizadores de las fiestas planean volver a programar los dos días perdidos, reabriendo para el sábado 9 y el domingo 10 de marzo. Lo que no se celebrará es la monta de caballos que estaba planeada para el domingo.Los toros comenzarán cerca de las 18 hs, junto a los chinamos, juegos y un salón de baile.Para los toros del domingo, el famoso toro Malacrianza le mostrará a la multitud lo “malcriado” que puede ser.
Bonifacio Diaz, Síndico por el distrito de Samara, dijo desconocer daños importantes en Samara y Barrantes aseguró que el daño en el distrito de Nicoya fue poco.
Los fuertes vientos fueron causados por un frente frío que azotó al país el sábado 2 de marzo, según Luis Alvarado Fajardo, meteorólogo del Instituto Nacional de Meteorología. Los vientos disminuyeron el martes 5 de marzo, pero todavía siguen soplando.
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