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Los humanos consumimos enormes cantidades de energía cada día. La electricidad se ha vuelto tan importante como el aire que respiramos, pero ¿cuántas veces se detiene usted a pensar en lo que hay detrás del interruptor, o en el impacto ambiental que esto genera?
De acuerdo con el Instituto Costarricense de Electricidad, en los primeros tres meses del 2016, la generación eléctrica para consumo nacional alcanzó un 97,14% con fuentes renovables.
Costa Rica aspira a ser un país carbono neutro para el 2021. Por su diversidad geográfica, la provincia de Guanacaste es una zona clave para lograr esta meta pues en ella hay diversas fuentes de producción de energía renovable, pues entre sus llanuras, montañas, ríos y volcanes se produce el 27% de la matriz eléctrica nacional, y no sólo la hidroeléctrica, sino también geotérmica (volcanes), eólica (viento), solar y de biomasa (materia orgánica).
Durante el primer trimestre del 2016, la generación eléctrica del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) corresponde a un 65,62% de energía producida a partir del agua, 15,60% del viento, 13,70% de geotermia (tierra), 2,20% de biomasa y un 0,02% de energía solar.
La revolución de la energía renovable propone decirle adiós a los combustibles fósiles los cuales han pasado una factura grande en el planeta Tierra. Actualmente el combustible fósil sirve como respaldo para el SEN y es la última fuente a la que se recurre para producir electricidad.
Es por esto que La Voz de Guanacaste quiso conocer las alternativas de energía limpia producida en la provincia, entre ellas la Planta Miravalles Solar, Planta Geotérmica Las Pailas, Parque Eólico Tejona y la planta de biomasa de Arroz Tío Pelón.
Como parte de su compromiso con el medio ambiente, la arrocera Tio Pelón comenzó a generar su propia energía con una planta pequeña hace ocho años. La población laboral de esta empresa es de 445 personas. 283 personas viven en la finca El Pelón de la Bajura y 13 de ellas trabajan en la planta de generación eléctrica.
En la arrocera Tío Pelón ubicada en Liberia se produce energía renovable a base de biomasa. Esta planta abastece la operación de la industria arrocera, un cultivo de tilapias, un quebrador y una comunidad de 54 casas. Seis toneladas de biomasa, los restos de la producción de arroz local, se incineran por hora para producir este tipo de energía que funciona a partir de materia como la cascarilla de arroz, chips de madera y pacas de paja de arroz
La topografía y el viento laminar (constante) que viaja del oeste hacen que la energía eólica en la zona de Tilarán sea reconocida a nivel mundial. Sin embargo, si hay condiciones de poco viento o en exceso no se puede producir energía, por lo que el verano (de enero a mayo) es la época óptima para ello. La energía eólica es una de las más limpias al no absorber el viento de manera artificial ni producir desechos contaminantes.
Ubicado en el Cerro Montecristo y mirando hacia el volcán Arenal, el Parque Eólico Tejona es uno de los ocho parques de producción de energía a partir del viento en la zona de Tilarán. Este es el único parque que le pertenece al ICE en la zona y cuenta con 30 aerogeneradores de 40 metros de altura. 20 funcionarios trabajan en esta planta que depende meramente el viento y la cual se mantiene las 24 horas del día encendida. Foto: Ariana Crespo
La Planta Miravalles Solar es la única planta fotovoltaica del país y la primera en Centroamérica. En el 2012 entró a operar como parte del Centro de Producción Miravalles el cual consta de cinco plantas geotérmicas y una solar, ubicados en las faldas del volcán. Como rutina de mantenimiento, Freddy Picado realiza dos inspecciones visuales diarias para revisar el sistema.
La Planta Miravalles Solar abastece alrededor de 600 hogares. Fue una donación del gobierno japonés y debido al microclima de la zona, opera como un laboratorio para ver el funcionamiento de este tipo de plantas en diferentes escenarios climáticos. Al ser los pioneros en esta tecnología, han recibido visitas de diferentes empresas como la de Dos Pinos o Coca Cola, quienes visitan la planta para conocer el equipo y valorar la posibilidad de instalarlo en sus negocios.
La planta geotérmica de Las Pailas en el Parque Nacional Rincón de la Vieja aprovecha el vapor de agua y vapor de salmuera (agua con alta concentración de sal) que se encuentra en estado líquido en los reservorios bajo tierra. Luego de haber cumplido con su función para generar la energía eléctrica, este recurso hídrico pasa por un sistema de enfriamiento para luego ser reinyectado en la tierra y de esta forma mantener el recurso vivo.
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