La construcción de la nueva torre médica en el Hospital de La Anexión no solo ha traído la esperanza de que mejoren las condiciones en los servicios de salud para los usuarios, sino también discordias por la forma en que se va a contratar al nuevo personal de la institución.
Desde el pasado martes 8 de setiembre, unos 75 trabajadores del hospital de La Anexión se mantienen en huelga indefinida y por ahora, el movimiento esta lejos de encontrar un punto en común entre los sindicatos y las autoridades del centro médico.
El paro lo integra personal de archivo, aseo, enfermería, farmacia, laboratorio, lavandería y vigilancia.
Por un lado, los funcionarios desean que el personal que se vaya a contratar sea de Nicoya y se den esas plazas a quienes han laborado de manera interina, mientras que la dirección general del hospital considera que ante las limitaciones en el presupuesto, es más barato contratar a una empresa externa para que brinde esos servicios.
Por esta razón es que los trabajadores decidieron hacer un paro en sus labores y se agruparon en un frente sindical conformado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud y Seguridad Social (SINTRASAS), el Sindicato Nacional de Trabajadores de Farmacia (SINTAF), el Sindicato Nacional de Servicios de Salud (SINASS) y la Unión Nacional de Empleado de la Caja y la Seguridad Social (UNDECA).
Henry Viales, secretario de conflictos de SINTRASAS, dijo “todo esto ha venido por un irrespeto a los acuerdos previos sindicales que hemos venido sosteniendo con las autoridades locales de hace 9 meses sobre la inminente privatización de los servicios con la nueva torre médica. Los trabajadores han decido sumarse a un movimiento de presión porque ya están cansados de escuchar promesas, hoy hay una participación de un 80% de los todos los grupos ocupacionales [del Hospital]”.
María Ester Fajardo Pérez, funcionaria que tiene 40 años de trabajar en el centro médico, expresó su malestar, “me duele mucho lo que está pasando porque cuando nos dimos cuenta que se iba a hacer una torre médica para nosotros fue una gran noticia, pero ahora nos da mucha tristeza que va a venir otra gente habiendo tanto desempleo en esta zona”.
Jesús Osorno Cubillo, secretario adjunto de SINTRASAS, mencionó que adicionalmente funcionarios del área de Salud de Nicoya y el EBAIS de San Martín se han sumado al paro de labores.
Aunque el pasado miércoles 9 de setiembre se realizó una inspección por parte de funcionarios del ministerio de trabajo, Anner Angulo, director del hospital, indicó que dicha visita fue de carácter informativo y no para mediar entre las partes.
“Llegó un funcionario del ministerio de trabajo a hacer un levantamiento de acta por motivo de una inspección. Ellos estuvieron hablando conmigo sobre el porqué se generó la huelga, cual es la petición de los sindicatos, cuantos están en huelga y cuanto se ha visto afectada la prestación del servicio”, informó Angulo.
El director del hospital considera que hasta ahora la protesta no ha afectado la prestación de servicios y tampoco han recibido quejas de los usuarios.
“Nosotros tenemos un plan de contingencia que da garantía de que los servicios se van a seguir prestando. No hemos recibido quejas de los usuarios. Los servicios operan en total normalidad, se están dando las consultas, se están entregando las recetas, los exámenes de laboratorio, y se están haciendo las cirugías”, indicó.
Además, Angulo fue categórico y negó cualquier tipo de acuerdo con los sindicatos, “no hay ninguna mesa de diálogo. Aquí no hay ningún acuerdo, la decisión ya está tomada. La contratación por terceros para la torre de hospitalización ya está dada”.
Ante esta postura, Henry Viales, secretario de conflictos de SINTRASAS, explicó que reforzaran el movimiento huelguístico y estarían convocando a trabajadores de otros gremios, aunque no reveló cuales serían.
Por ahora, los huelguistas se movilizan cada hora frente a la entrada del hospital permitiendo el paso regulado de los vehículos.
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