En todos los niveles del surf, hay un gran número de errores similares que todos cometemos con frecuencia. Usualmente, es posible cometer tan solo un error a la vez antes de caerse. Esto es muy bueno, ya que se trata de tan solo un error que se corrige con no cometerlo la próxima vez. Pero para esto, es importante saber cual fue ese error.

Uno de los errores más parecidos, comunes y frustrantes que uno puede cometer, así como uno de los más rápidos de corregir, es el enfoque. Y no nos referimos a su enfoque hacia el surf o la vida, sino específicamente a sus objetivos, i.e. ¿hacia donde dirige su mirada mientras trata de hacer lo que quiere hacer? Esto es importante ya que hacia donde usted dirija su mirada determinará, de forma rápida, su propia dirección. Es importante que usted tenga objetivos, o blancos, claros. Y dirija su mirada hacia a donde quiere ir. Por ejemplo, darle la espalda a la espuma y su cuerpo le seguirá.

Esto suena como algo simple, sin embargo, es frecuente que nos olvidemos de ver. ¿Con cuanta frecuencia surfea usted a lo largo de la ola y ya sea que siempre se encuentra viendo hacia abajo o quiere golpear el labio pero no logra colocar la tabla justo donde lo desea? ¿Sabe hacia adonde esta dirigiendo su mirada? Por lo tanto, la manera de enfrentar esto es colocando “blancos” de forma mental, o marcas en “X”, a lo largo de la ola. A donde quiero ir ahora y a donde querré ir después.

Establecer un plan a lo largo de la ola enfocándose en el blanco al cual quiere dirigirse cambiará de forma rápida su conciencia de la ola y será el primer paso para que usted utilice la ola de una forma más funcional.
Y siempre recuerde esta simple frase: “Hacia donde dirija su mirada se dirigirá usted”.