Linda Wiegers alias Lulu es joven de espíritu, cuerpo y mente. A sus 64 años tiene una figura y músculos mas tonificados que la mayoría de las personas en sus veintes. A las 6:15 a.m va a surfear, para muchos es muy temprano, para ella es simplemente otro día.
Cada mañana Lulu maneja su bicicleta personalizada para poder llevar su tabla de surf a la playa. Originaria de Hawái y California vino por primera vez a Nosara hará cinco años atrás, y desde entonces ha repartido su tiempo entre Nosara y Hawái, aunque esta buscando quedarse permanentemente en Costa Rica. "Necesito el sol," dice con una sonrisa, "quiero que decir que con 35 grados me pongo un traje de neopreno".
La primera visita de Lulu a Nosara fue después de perder su trabajo en Hawái. Camarera y surfista de toda la vida, ella se mudó después de que el restaurante en el que trabajaba cerró. Le dieron seis meses de seguro de pago y decidido utilizar ese dinero y tiempo para venir a Costa Rica, donde tenia a amigos. Fueron esos amigos quienes le dijeron, "Todos van a Nosara ahora".
Y después de esa visita, se enamoro del lugar. "Adoro Costa Rica, la gente del lugar son impresionantes y súper agradables," dijo la surfista quien siempre vuelve a las olas "Tienen una playa tan agradable y son tan generosos por compartir esas olas con nosotros". |
|
Lulu estira sus músculos temprano por la mañana antes de ir a surfear. Desde
que llego a Nosara, ella hace yoga para surfos y dice que le ayuda con los
dolores musculares de este extremo deporte. |
|
|
|
Linda Weigner, conocida como Lulu, posa para una foto en playa Guiones, su
lugar de surf preferido. |
Una de sus metas es surfear más y trabajar menos. Ha podido lograr esto alquilando su hogar en Hawái mientras está en Nosara. Las ganancias del alquiler pagan por su casa y su vida aquí. Una vez que ella consiga la residencia permanente, no habrá necesidad de volver.
Durante sus años aquí ella ha desarrollado una relación con la escuela de surf, Surf Simply School, quienes describen a Lulu como "Impresionante". Lulu dijo que la escuela fue uno de los primeros lugares donde la ayudaron a sentirse bienvenida en Nosara.
La salud y el bienestar están en una balanza, dice ella "cuando somos jóvenes no nos preocupamos por nuestro cuerpo, y cuando empezamos a envejecer y (el cuerpo a) dolernos es cuando ponemos atención. Por eso yo me alimento bien, hago yoga, voy en bicicleta a todas partes y surfeo casi diariamente.”
Casi lista para surfear las olas de la mañana, Lulu se estira y habla de un amigo que vive un estilo de vida semejante, "no hay muchas personas de nuestra edad que hacen lo que nosotros hacemos". Este es su secreto, ella actúa como joven, pasa tiempo alrededor de jóvenes y como resultado, ha podido permanecer joven.
|