El diario oficial La Gaceta publicó el 19 de diciembre el documento que regularía las construcciones de Nosara. Es la tercera versión del reglamento temporal para proteger la zona de amortiguamiento del Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional.
Una vez publicado, entró en periodo de consulta por última vez durante diez días hábiles (que habrían terminado el 3 de enero) antes de su publicación definitiva. La propuesta, presentada por la Asociación Cívica de Nosara (ACN) en abril del 2019, pretende servir de “colchón” contra el impacto que generan las actividades humanas sobre la zona protegida.
“Una buena parte de las regulaciones se hicieron a partir de la propuesta del reglamento de desarrollo sostenible del Parque Nacional Marino Las Baulas y del Refugio de Vida Silvestre Camaronal”, había explicado en mayo el representante de la ACN, Francisco Jiménez.
El director del departamento de control constructivo de la Municipalidad de Nicoya, Josué Ruiz, informó que, para esta versión, la Municipalidad modificó al menos el 40% del reglamento, tomando en consideración los comentarios y sugerencias de la gente.
Dudas
Sin embargo, la Asociación de Desarrollo Integral de La Esperanza Sur de Nosara (Adiles) y la Asociación de Desarrollo Integral de Nosara (ADIN) han criticado el plan, alegando que a los pobladores les falta información para saber cómo les afecta o si del todo verán algún perjuicio.
Así lo expresó la presidenta de la Adiles, Silvia Carrillo: “Las autoridades no nos han explicado nada detalladamente, ni cómo nos puede afectar, entonces no podemos posicionarnos a favor o en contra”.
En contraste, Ruiz aseguró que han realizado múltiples actividades de difusión.
“Una de las aristas es que sea un proceso participativo. Por eso mismo cambiamos tanto el reglamento”, afirmó.
Según Ruiz, en los últimos cuatro meses la Municipalidad realizó al menos cuatro actividades en diferentes espacios de Nosara para abordar el tema. Entre los lugares visitados están Santa Marta, el centro de Nosara y La Esperanza. A la última reunión en La Esperanza asistieron solo 10 personas.
En una primera visita a Nosara, La Voz de Guanacaste constató que varios vecinos tenían muchas dudas sobre el plan. Por esta razón, le preguntó a los miembros de las asociaciones y a otros habitantes de Nosara cuáles eran sus mayores dudas sobre el reglamento temporal.
Una vez recopiladas y organizadas las preguntas, este medio procedió a realizar entrevistas con Ruiz, con el coordinador de proyectos de la NCA y con una experta en sostenibilidad, así como a revisar documentos oficiales sobre el proyecto. A continuación las respuestas:
¿Cuáles son las modificaciones principales del borrador actual?
La versión anterior ponía un límite para la división de terrenos en propiedad privada. Ahora, los dueños podrán segregarlas pero en cada terreno dividido solo se podrá construir sobre un 50% de la superficie.
También quitaron las recomendaciones sobre plantaciones nativas y construcciones de cercas y tapias. Además, aumentaron la altura máxima permitida de las nuevas construcciones; ahora los edificios no pueden pasar de los 9 metros en la zona de impacto directo (1 km después del refugio) y de los 12 metros en la zona indirecta (4 km después de que termina el primero).
Lo que sí mantienen es la obligación de contar con sistema de tratamiento de aguas residuales en las nuevas construcciones y los lineamientos de cómo instalar nuevas iluminaciones en la zona. Ver diagrama.
¿Cómo va a afectar el reglamento a las construcciones ya hechas en Nosara?
En nada. El proyecto solo aplica para las nuevas obras de construcción, remodelación, reparación, ampliación o demolición. Por ejemplo, si dentro de su propiedad desea cambiar o agregar nuevos sistemas luminarios, deberá instalarlos con dirección a las paredes y hacia el piso. En senderos, la iluminación debe estar a, máximo, 60 centímetros sobre el piso.
¿Quién está detrás del reglamento?
La Asociación Cívica de Nosara realizó la propuesta del reglamento en abril del 2019, siguiendo las recomendaciones del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC). Así lo corroboró el coordinador de proyectos de la ACN, Francisco Jiménez. Posteriormente, la muni acogió la responsabilidad completa de sus futuras modificaciones y el financiamiento económico.
Ruiz confirmó que el municipio presupuesta ₡40 millones al año para estos procedimientos, que los divide entre este reglamento y el plan regulador de Nicoya. De hecho, este reglamento será temporal, hasta que la municipalidad publique el plan regulador de Nicoya.
¿Por qué lo hacen ahora y no antes?
La Asociación Cívica de Nosara explica dentro de su sitio web que planteó el reglamento al ver el crecimiento de construcciones en la zona y la falta de lineamientos para hacerlo. También lo han destacado en múltiples entrevistas las personas que integran esta asociación.
Concejo Municipal de Nicoya ya aprobó segunda publicación del reglamento en La Gaceta.
Del 2010 al 2016, la intención de construir en Nosara se ha triplicado, según cifras del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos analizadas por La Voz. Mientras en el 2010 se tramitaron 10.285 m2, en el 2016 fueron 30.464 m 2, con un aumento constante casi todos los años.
“Hasta ahora se toma la iniciativa (de la elaboración del reglamento temporal) porque las construcciones en Nosara van en aumento y todavía no existe un plan regulador que las controle. Era urgente”, afirmó Jiménez, de la NCA.
¿Cómo ayuda el reglamento a Nosara?
Para contestar a esta pregunta, La Voz acudió al Centro para la Sostenibilidad Urbana (CPSU), ONG con cinco años de experiencia en ciudades. Su coordinadora de acción climática, Jessie Vega, enfatizó en que las comunidades como Nosara dependen de los recursos naturales para atraer al turismo.
“Si no se regulan las construcciones vamos a perder ese capital natural donde económicamente se recuesta Nosara”, dijo.
“Eso le da trabajo a cientos de personas y cuando se pierda el ecosistema, se perderá la economía, los alimentos y las aguas que se usan en la región”, agregó.
Vega enfatiza que el reglamento ayudará a la Municipalidad de Nicoya y a Costa Rica a cumplir sus metas para combatir el cambio climático.
“Costa Rica tiene grandes metas de diversidad biológica y de acción climática. Tener esa trama verde en las ciudades ayuda a la regulación del clima y absorbe carbono, que ayuda a reducir las emisiones del país”, dice.
La Municipalidad de Nicoya está participando en el programa nacional “Carbono Neutralidad, realizando un inventario de sus emisiones para identificar cómo bajar su huella de carbono.
“Con una medida como el reglamento se puede ayudar a amortiguar ese proceso de pérdida de diversidad biológica y a evitar que el cantón siga emitiendo más carbono”, finalizó.
¿Cómo puedo participar más activamente?
La muni reactivó el correo institucional [email protected] para recibir comentarios sobre el reglamento.
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