COVID-19, Santa Cruz, Salud

Los casos COVID-19 disminuyeron en Santa Cruz, ¿cuál es la verdadera razón detrás de esto?

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Santa Cruz reportó una reducción significativa en el reporte de casos COVID-19 en la última semana de enero. ¿Qué explica este comportamiento? No es por ser de una raza diferente, sino porque a inicio de año el Área de Salud del cantón fortaleció el seguimiento de los casos positivos y de sus posibles contactos directos para evitar que más personas de la zona se contagiaran con el virus. 

La gestión más oportuna hizo que el cantón pasara de un promedio de seis casos positivos por cada 10 pruebas de diagnóstico del virus en diciembre, a dos o tres casos a finales de enero. Así lo reportó el coordinador de vigilancia epidemiológica del cantón, Luis Alonso Matarrita. 

El mayor cambio está en que el personal del Área de Salud llama al menos una vez al día a las personas en aislamiento sobre su condición. Además, solicita a las personas contagiadas  dar una lista de aquellos con los que tuvieron contacto los días antes de tener el resultado positivo. Posteriormente, Salud contacta a esas personas para preguntarles sobre posibles síntomas y, de ser necesario, les solicita acudir al centro de salud para hacerles la prueba. 

Antes de enero, Salud recomendaba a la población contagiada alertar a las personas vistas recientemente sobre su resultado positivo, pero no podía dar seguimiento a cada una de ellas. 

El coordinador explicó que con la nueva forma de trabajo rastrean personas con el virus que de otra forma no localizarían.

 Hemos conocido casos de personas que presentan síntomas fuertes de la enfermedad, pero que tienen miedo de ir al hospital porque le daríamos orden de aislamiento y tendrían que estar encerrados quince días. Eso pone en riesgo a todo el cantón”, enfatizó. 

Salud había rastreado varios casos de COVID-19 que pudieron asistir a las aglomeraciones en las fiestas de Santa Cruz, más no lo hicieron porque habían recibido órdenes sanitarias días antes del evento. El epidemiólogo explicó que de no haber cambiado esa gestión, el escenario del cantón sería distinto. 

El Área de Salud santacruceña también le está dando atención especializada a los pacientes con “factores COVID”. Es decir, todos aquellos con afecciones como enfermedades crónicas, obesidad o vejez, que los hace más vulnerables al virus. Al vigilar constantemente esas condiciones, baja el riesgo de que la condición del paciente se agrave en caso de adquirir el virus.

Para Matarrita otro factor que influyó en la baja de casos, no solo en Santa Cruz sino en el país, fue el cambio de restricciones vehiculares dictadas desde inicio de año. Las medidas desalentaron a la población a trasladarse innecesariamente. 

Los picos de la pandemia en Santa Cruz

Según las estadísticas del Ministerio de Salud, Santa Cruz tuvo un pico de casos en diciembre del año pasado. La ciudad folclórica reportó en ese mes 476 casos, la mayoría concentrados en el distrito central, Tempate y Tamarindo. 

Matarrita afirma que el incremento de casos se dio en ambientes laborales y que muchos casos fueron detectados porque las mismas empresas realizaron tamizajes a sus trabajadores. 

Eso le dio una especie de “visión” al personal del Área de Salud: los casos no van a llegar a Salud, Salud deberá llegarle a ellos. Así cambiaron la estrategia de vigilancia. 

Para el 11 de diciembre, Santa Cruz reportó 43 casos en un solo día. Cuatro días después, el Ministerio de Salud y la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) elevaron al cantón a alerta naranja. Esto significaba que había un alto riesgo de contagio en la zona. 

La ciudad folclórica bajó a alerta amarilla tan solo 15 días después (29 de diciembre). Desde entonces, la cifra más alta de casos fue el 16 de enero con 28 casos diarios, pero a lo largo de ese mes la cantidad de contagios fue menor. En el primer mes del año, el cantón reportó un promedio de ocho casos al día, la mitad de los que reportaba en diciembre. 

El pico más alto de Santa Cruz ocurrió en octubre del año pasado, cuando reportó 600 casos en menos de una semana debido a un brote del virus en Las Catalinas. 

Al 2 de febrero, Santa Cruz reporta 381 casos activos, la cifra más baja desde el 24 de octubre. Aún así, el coordinador de Salud no descarta la posibilidad de un aumento de casos en las futuras semanas.

Lo que observamos es que esto (COVID-19) tiene un comportamiento de oleaje. Ahorita probablemente ya pasamos una ola, pero eso no descarta que una segunda o tercera ola venga más fuerte y vayamos a tener más casos. Entonces evitamos eso siguiendo las recomendaciones”, enfatizó. 

Matarrita recalcó las recomendaciones del lavado de manos, distanciamiento social, evitar asistir a eventos sociales y en caso de presentar síntomas de la enfermedad, asistir inmediatamente al centro de salud más cercano. 

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