La mañana del 20 de junio parecía ser normal como cualquier otra, jóvenes dirigiéndose a sus centros de estudios, gente en las calles rumbo a sus trabajos…pura cotidianidad. Sin embargo, detrás de esta aparente calma, se empezaba a respirar una emoción que crecía con el paso de las horas.
Como si el tiempo se hubiera detenido a las 10:00 a.m. la mayoría de las calles en Nicoya quedaron vacías, la gente se agrupó donde hubiera una pantalla y hasta las escuelas y oficinas paralizaron labores.
La sele jugaba su segundo partido del mundial de fútbol en Brasil 2014 frente a otro campeón, esta vez, ante la difícil Italia. El nerviosismo inicial y “la comedera de uñas” de quienes sin parpadear miraban la televisión se transformó en júbilo tras el gol de Bryan Ruiz al 44’ del primer tiempo.
Durante la etapa complementaria, se cambiaron algunos actores en el terreno de juego pero no así el resultado y tras el pitazo final del referí chileno Oses, quien será recordado por no señalar un claro penal a Joel Campbell, se desató la euforia colectiva de los nicoyanos.
El blanco, azul y rojo flameó en los vehículos, en las casas, en las calles, en la gente. Por donde se pasara, las calles de la Ciudad Colonial eran pura emoción, alegría y festejos.
La Plazoleta del parque Recaredo Briceño fue un punto importante de encuentro de los aficionados nicoyanos quienes con trompetas, pitos, brincos y brazos levantados celebraron con locura la victoria histórica.
Eduardo Ramírez Noguera, vecino de Nicoya expresó: “fue un excelente rendimiento del equipo y todos hicieron un trabajo en grupo y la defensa estuvo muy ordenada”.
En tanto Álvaro Luis Piñar Jiménez, otro de los aficionados nicoyanos dijo que para èl “los cambios que hizo el profe [Jorge Luis] Pinto fueron los mejores, lo vimos en el Bar Eli, hoy hay loquera en todo Nicoya”.
Por su parte Julio Cesar Jiménez Ortega, aseguró “hoy hay full party en mi casa y caravana en la noche”.
Los festejos abarcaron también a los funcionarios de la municipalidad de Nicoya quienes se reunieron en el salón de la Casa de la Cultura.
“Gran parte de la administración municipal vivimos intensamente todo el partido”, expresó el alcalde Marco Jiménez y agregó: “Nos han dado una gran alegría estos muchachos y sobre todo nos da un significado esta victoria que en Costa Rica hay suficiente material humano y las cosas se pueden hacer.”
El personal de la municipalidad se unió a la algarabía y suspendió las labores a eso de la 1 de la tarde.
Los festejos en Nicoya fueron una réplica de lo que se vivió en todo el país. Como hace 24 años Costa Rica volvió a ganar otro partido en la fase de grupos de un mundial y aseguró su presencia a la ronda octavos de final. La historia continua…
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