Regional, Sámara

Samareños de bajos recursos limpian la playa y reciben ayuda del IMAS

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Con el objetivo de brindar ayuda económica a personas en condiciones de pobreza y desempleo, el pasado mes de octubre se aprobó el programa de Manos a la obra del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), en Sámara.

El proyecto consiste en que unos 12 samarañeros ayudarán a la comunidad en labores de limpieza de la playa, del distrito y en campañas de prevención del dengue y recibirán una ayuda económica por parte del IMAS.

La iniciativa surgió a través de la organización sin fines de lucro CREAR, asociación que se ha destacado en el apoyo a la educación y en la protección del medio ambiente para el distrito samareño.

“Entre varios de aquí empezamos a hablar del proyecto de Manos a la obra, que ya existe en otros lugares, y empezamos a ver qué necesitábamos hacer para traerlo a Sámara y para que el IMAS los aceptara, para así ayudar a muchas familias que tienen muchas necesidades”, comentó Laura Ellington, presidenta de la asociación CREAR.

De acuerdo con Daniela Matarrita, Coordinadora del IMAS de Nicoya, los aspirantes al proyecto fueron propuestos por CREAR; sin embargo, se sometieron a pruebas del instituto.

“El IMAS elabora un serie de entrevistas psicosociales para corroborar que estas personas sí están en condiciones de pobreza y de vulnerabilidad. La idea es ayudar a estas personas y que ellos también retribuyan a la comunidad”, dijo Matarrita.

La coordinadora explicó que por razones de presupuesto, los proyectos de Manos a la obra en el cantón de Nicoya son aprobados por un plazo de cuatro meses.

Ayuda y alivio

Los beneficiados recibirán un apoyo mensual de ¢100.000 y ¢30.000 para materiales y uniformes. Ellos deberán trabajar de lunes a sábado, cuatro horas y media por día.

Para María Luisa Valencia, vecina del Torito y madre soltera de siete hijos, esta ayuda económica es una gran oportunidad, pues desde hace cuatro años no consigue trabajo y vive de lo que puede ayudar su hijo mayor.

“Todos somos personas de bajos recursos y para mí esto es una bendición de Dios. La situación es muy difícil y cada vez hay menos trabajos”, comentó Valencia.

Manos a la obra funciona en el país desde el 2012 y el cantón de Nicoya cuenta con estos proyectos en las comunidades de Nambi, Pozo de Agua, Santa Ana, Rosario, Caballito, Corralillo, San Lázaro, San Vicente, Caimital, Barra Honda, Acoyapa, Talolinga, La Mansión, Garcimuñoz, San Martín y ahora en Sámara.

 

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