A menos de un año de haberse reparado el techo del Mercado Municipal de Santa Cruz, ya tiene desprendimientos de tablillas del cielo raso, que originan huecos en la estructura.
De acuerdo con Diego Rodríguez, ingeniero municipal a cargo del proyecto, el mercado tuvo una inyección de casi ¢18 millones en octubre del 2014, en donde se arregló el techo y se construyeron tres quioscos nuevos.
Rodríguez explicó que en enero del 2015, los fuertes vientos que azotaron el país se trajeron abajo las tablillas del cielo raso; sin embargo, el contratista Eliezer Vallejos reparó el daño. Un mes más tarde, las tablillas se volvieron a caer.
«Determinamos que no era algo imputable del contratista, sino del diseño, pues los vientos que se dan ahí no permiten ese sistema de tablilla. Ese mismo sistema lo pusimos en la red de cuido y no ha generado problemas», dijo el ingeniero.
Opinión contraria es la de Shirleny Molina, Coordinadora del Mercado, quien considera que el trabajo no fue ejecutado como se debió.
«Ante mis ojos y sin tener criterio técnico, yo siento que el trabajo no se hizo bien. Me parece que le faltó soporte a esa tablilla que se despegó. La verdad a mí me da mucha pena que estas cosas pasen, porque eso está a visibilidad de todos», comentó Molina.
Rodríguez aseguró que a principios de agosto se estará enviando a Proveeduría de la Municipalidad el informe de una contratación adicional para que se reparen los daños, los cuales se estiman que podrían costar ¢600.000.
Las láminas del cielo raso de la terminal de buses de Santa Cruz que forman parte del Mercado, generan huecos en donde las palomas se meten a hacer sus necesidades.
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