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Un sueño universitario llamado Guanalettas

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Desde que Andrés Badilla y Reiner Vásquez estudiaban dirección de empresas en la Universidad de Costa Rica, en Liberia, sabían que lo suyo no era servirle a un patrón. Su meta era montar su propia empresa.

Hoy, con 27 y 25 años respectivamente, y un título de licenciados en administración, son dueños de la heladería artesanal Guanalettas, un emprendimiento 100% guanacasteco ubicado en la carretera principal de Filadelfia.

El proyecto nació en el 2015 con el nombre Heladitos Sardinal, pero eso era solo para ganarse una “extrilla”.

“Teníamos gastos en la U, pero no podíamos tener un trabajo porque la licenciatura nos consumía mucho tiempo. A Reiner siempre le gustó la cocina y  se nos ocurrió vender helados en la casa de él, en Sardinal”, contó Badilla.

Luego de buscar diferentes opciones de financiamiento y obtener apoyo del IMAS, en noviembre del 2016 nació Guanalettas.

Además de tener la heladería en Filadelfia, distribuyen paletas en Tamarindo, El Coco, Liberia y Playa Danta. Actualmente producen entre 2.500 y 3.000 helados al mes. Desde el helado hasta el empaque, todo lo hacen solos.

¿A qué sabe Guanalettas?

Lo mejor de los helados es el sabor a fruta natural y las ingeniosas combinaciones. Por ahora, hay 32 tipos de helados.

Entre ellos están los frutales: 80% fruta y el 20% agua, endulzados con azúcar orgánica. Con solo una probada, usted sentirá que se está comiendo la fruta fresca. Algunas combinaciones son sandía-kiwi, cas, y fresa-limón (tienen un precio de ¢1.300).

Si prefiere atreverse más con los sabores, los jóvenes también ofrecen la línea premium (van de los ¢1.300 a los ¢1.700). Por ejemplo, está el coco-lavanda, que está hecho con leche de coco y té de lavanda. También está el fresa tentación que es con chocolate blanco y jalea de fresa.

Pensando en las personas con diabetes o en aquellos a quienes les gusta cuidarse con las calorías, Guanalettas dispone de la línea de “especiales”, que son endulzados con estevia orgánico (cuestan ¢1.300).

La oferta también se amplía con las opciones a base de yogurt o los cremosos, que son con leche.

El sueño de estos guanacastecos es llevar sus helados a todo el país y están ahorrando para poder invertir en más equipo que les ayude a reducir el tiempo de producción y así ampliar su oferta.

  • Dirección: 50 metros al norte del servicentro de Filadelfia.
  • Horario: De lunes a domingo, de 11 a. m. a 8 p. m.
  • Lo bueno: Helados de buena calidad. Se siente el sabor de la fruta. Aceptan tarjeta.
  • Lo malo: La heladería es muy caliente. Faltan ventiladores. 

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