Entretenimiento

Docentes de Guanacaste aprendieron a usar el poder de la música

La ciencia ha descubierto en los últimos años que utilizar música con fines terapéuticos bajo la tutela de un experto tiene efectos positivos en la vida de las personas. Puede mejorar la autoestima, reducir la preocupación por la muerte en los adultos mayores, favorecer la recuperación en la salud de los pacientes internados en hospitales y ayudar a niños con problemas del habla o autismo.

Con esto en mente, y sabiendo que muchas veces las condiciones de trabajo de los docentes en Guanacaste no son las mejores, La Voz de Guanacaste organizó este sábado 7 de noviembre un taller de musicoterapia para 20 docentes de la provincia.

En el taller que se llevó a cabo en la escuela del barrio Los Ángeles de Nicoya, participaron los ganadores del concurso que el periódico promovió durante el mes de octubre, y fue liderado por el especialista Max Terán, musicoterapeuta clínico, quien solo dos días antes regresó de Argentina donde estuvo realizando una certificación en musicoterapia neurológica.

Profesores de Abangares, Liberia, Nicoya, Hojancha y Nandayure se dieron cita durante más de tres horas para aprender sobre esta disciplina, y conocer algunas técnicas que les ayudarán a mejorar la comunicación dentro de sus equipos y a manejar el stress propio de la labor docente.

Para Terán, las condiciones del clima, el tamaño de las aulas y la cantidad de estudiantes que deben atender, significan grandes retos para los profesionales de la educación, quienes muchas veces no saben cómo canalizar las emociones que sienten ante estas situaciones.

Terán cree que la musicoterapia es un aliado clave a la hora de manejar las emociones de manera asertiva.

En la actividad se intercambiaron ideas, compartieron experiencias y exploraron emociones gracias a los sonidos de la música.

“Este taller ha venido a abrirnos un grandioso abanico de posibilidades para trabajar nosotros como profesionales, en nuestro ámbito personal, pero también con nuestros grupos de estudiantes. Estoy ansiosa por aprender más y llenar mis clases con música para el alma, que construya y mejore la comunicación entre todos,” dijo Juanita Parajeles, psicóloga y docente, quien vino desde Abangares y trabaja en Cañas.

Parajeles espera que la incursión de la musicoterapia en centros educativos de Guanacaste pueda ser una gran oportunidad para estudiantes con espectro autista.

Carmen Medina, profesora en varias escuelas de Nicoya, dijo que comunicarse cantando y bailando siempre sería más significativo para las estudiantes, facilitaría el trabajo con ellos, y ayudaría a identificar sus problemas o aptitudes de manera más efectiva y divertida.

Terán dijo que nunca había tenido un grupo más “apuntado y alegre” que el del sábado, y le recomienda a todos aquellos que trabajan en la docencia en Guanacaste que no se olviden de su salud física y emocional.

«Muchas veces se queda la persona en el hacer y el trabajar olvidando nuestra parte creativa y expresiva, que cuando aflora permite un mejor estado de salud física y emocional. No debemos olvidar que vamos perdiendo habilidades sociales y de comunicación por estar centrados en el stress que nos agobia.»

Comentarios