Nosara, COVID-19

Banco de alimentos, una alternativa para sostener a la comunidad turística de Nosara en tiempos de coronavirus

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Jo Ellen Nott y Seidy Juárez despiertan desde las primeras horas de la mañana enfocadas en recaudar fondos, empacar, montar y mandar paquetes de comida. Las llamadas no han parado desde que anunciaron que el Nosara Food Bank (banco de alimentos de Nosara) ayudaría a quienes se quedaron sin empleo por la crisis del Covid-19. Desde entonces, su vida es casi como una batalla contra el tiempo.

En marzo, la dinámica de Nosara cambió por completo. El virus trajo consigo el cierre de fronteras y playas, que como efecto dominó obligó a la clausura temporal de restaurantes y hoteles en uno de los distritos que más depende del turismo en el cantón de Nicoya. 

A la fecha, más de 1.400 personas han solicitado ayuda del banco de alimentos, y otras 40 han ofrecido sus servicios como voluntarios para acompañar la gestión de ambas mujeres. 

La organización tiene diez voluntarios atendiendo el call center (2682-1073), otro comité ofreciendo sus vehículos para llevar los paquetes y otros encargados de dar a conocer la iniciativa dentro de las comunidades más pobres de Nosara.

La comunidad ha respondido con una solidaridad increíble”, dice Nott.

Eso puede verse reflejado en la cantidad de donaciones. Hasta la fecha, el Food Bank ha recibido más de $40.000 de 141 donantes. Este dinero es usado para comprar toda la comida que viene en los paquetes y la gasolina para llevarlos a las casas. A la fecha han gastado el 50% de ese monto. 

La meta para las organizadoras es llegar a los $75.000.

“Vamos a dar paquetes hasta que se nos acabe el dinero”, enfatiza Nott. 

El Food Bank inició sus operaciones en 2013, repartiendo pequeños paquetes a cinco familias nosareñas en situación de riesgo. Con el tiempo la cantidad aumentó, y para marzo de este año ya tenían a su cargo unas 50 familias. 

Según la organizadora, los fondos para los paquetes salen de una campaña de donación permanente de la misma comunidad, especialmente la extranjera. 

Las ciudades como Nosara demuestran la tremenda desigualdad social. Que los extranjeros demos el apoyo económico es parte de una deuda histórica”, afirma Nott. 

El Food Bank, sin embargo, es una combinación de los dos mundos del distrito. Jo Ellen Nott es una maestra estadounidense retirada que vive en Nosara desde hace unos años. Por su parte, Seidy Juárez es nosareña y ha sido líder comunitaria por más de una década. 

Juárez también coordina la adquisición de los alimentos, pero eso también ha tenido que cambiar. Mientras antes armaban los paquetes pagando solo los gastos administrativos al banco de alimentos regional, en Brasilito, ahora han tenido que acudir a los supermercados locales. A raíz de la crisis, el banco regional ha tenido que priorizar otras organizaciones como las de adultos mayores, cuidados paliativos y habitantes en situación de abandono. 

Ambas representan dentro de la organización las necesidades de cada comunidad. En un momento así, dice Nott, esta diversidad de voces es necesaria: Nott tiene incidencia para traer donaciones por parte de los extranjeros, y Juárez para saber cuáles comunidades las necesitan más.

A la junta directiva también entró Ethel Araya y Marita Caillaux, quienes están manejando el call center y parte de la organización interna. 

¿Cómo puedo solicitar esta ayuda?

El Food Bank da el bono de comida a habitantes que viven entre Ostional y Barco Quebrado, y que fueron despedidos o su jornada fue reducida por las consecuencias de la pandemia. También pueden aplicar aquellos trabajadores informales quienes han sufrido pérdidas económicas a partir de las restricciones y las medidas de aislamiento.

La cantidad de paquetes que distribuyen por familia depende de cuántos miembros tiene cada una. Es decir, en una familia con tres adultos sin trabajo y un menor de edad, la organización dará cuatro paquetes. Sin embargo, si el menor de edad ya recibe una ayuda alimentaria del Ministerio de Educación, el Food Bank no le brindará otro.

Cada paquete dura un mes, según cálculos de la organización. Estos serán distribuidos mes a mes hasta la puerta de la casa de los solicitantes por al menos tres meses, para evitar aglomeraciones. Sin embargo, según el flujo de donaciones valorarán distribuir los paquetes dos veces al mes.

Si usted desea solicitar el paquete de alimentos puede llamar al 2682-1073 o aplicar en este enlace. Si desea donar al Food Bank, puede hacerlo aquí. en este enlace.

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