General, Espiritualidad

¿Es usted el hombre o la mujer de las cavernas de la actualidad?

Cuando alguien nos responde de mala gana o con vocabulario soez ¿cómo solemos reaccionar? A veces  reaccionamos con asombro al observar una actitud y comportamiento desagradable, o por el contrario,  de forma similar o hasta más agresiva.

Desde el inicio de todos los tiempos el ser humano ha tenido que soportar o que esperar a que le toleren su mala actitud o malos tratos.  En un principio, se dice que era por sobrevivencia ya que había que pelear hasta por la ración de comida, sobre todo en la tan mencionada época del “hombre de las cavernas”.

Aunque las condiciones de vida han cambiado, en variadas ocasiones observamos comportamientos muy semejantes a aquellos que muy probablemente tuvieron el hombre y la mujer de las cavernas.

¿Será acaso que usted enorgullece de llevar un pequeño o gran hombre de las cavernas en su corazón? Solo basta ver los accidentes que hay sobre la carretera, muchos de ellos debido a falsos adelantamientos, personas que lejos de querer compartir la vía lo que les gustaría es ser los únicos sobre ella o conductores de autobuses que andan con el nivel de distrés (estrés negativo) al límite, sin concientizar sobre el daño que se hacen a sí mismos y el riesgo en el que colocan a sus pasajeros.

Desde su casa, su trabajo y desde su comunidad pueden cambiar las cosas, eso sí, se necesita de disposición para querer cambiar las actitudes y el comportamiento y no pretender que las buenas relaciones familiares, sociales y laborales caigan desde el cielo sin asumir una responsabilidad y un quehacer de buenas prácticas.

El tiempo en las cavernas ya pasó, ya está obsoleto. Ahora tenemos la oportunidad de mayor acceso a educación, al aprendizaje y a mucha información gracias al Internet que nos ayuda  a mejorar nuestras relaciones sociales, pero el verdadero escape de las cavernas solo está en la disposición de cada uno de nosotros.

Comentarios