Cuando puede, Fernando Cordero Arguedas trabaja en lo que se encuentra, pero últimamente el cuidado de su madre de 95 años de edad ha sido un trabajo de tiempo completo desde que ella tuvo un derrame cerebral hace unos meses. Además, su tío de 93 años de edad padece problemas del corazón, y cuatro sobrinos de su esposa vinieron a vivir con ellos hace un año cuando la madre perdió la custodia de ellos. En total, hay 10 bocas que alimentar en su casa en el barrio de San Pedro de Nosara, así que cuando recibieron una donación de alimentos y jabón el 20 de julio, lo consideraron una bendición.
Familias como esta, que se enfrentan a graves dificultades económicas, están recibiendo una ayuda extra del Nosara Food Bank (Banco de Alimentos de Nosara), que fue lanzado el 10 de junio para proporcionar alimentos y otros artículos necesarios a familias en extrema necesidad.
Linda Tarlow, quien vive en Guiones, organizó la recolección de alimentos inspirada en su propia experiencia trabajando con familias en Esperanza. Como Tarlow explicó: “Hay dos tipos de inseguridad alimentaria en la zona. Algunas familias viven en la pobreza extrema, por diversas razones, y necesitan ayuda con frecuencia. También hay muchas, muchas familias que necesitan ayuda durante la temporada lluviosa de septiembre y octubre, cuando numerosos trabajadores son despedidos de sus puestos laborales. El enfoque del Banco de Alimentos de Nosara es ayudar a las familias con niños”.
El proyecto ha sido respaldado por la Asociación Cívica de Nosara (NCA) y la Asociación de Desarrollo Integral de Nosara (ADIN). Los alimentos y otros artículos recogidos son distribuidos por la Pastoral Social de la Iglesia Católica de Nosara. La Pastoral distribuye a las personas de todos los credos y llega incluso a familias aisladas a lo largo de la parroquia desde El Torito de Samara hasta San Juanillo, a la vez impartiendo un mensaje de las escrituras.
De las 25 familias que recibieron ayuda durante el mes de junio, 17 familias viven en la zona de Nosara, según Oscar Cordero Arias, miembro de la Pastoral. “Si tuviéramos mas alimentos no serían 25 familias sino 40 o más”,indicó, y aseguró que las familias seleccionados son visitadas y cuidadosamente evaluadas para asegurar que realmente están en necesidad. “Vienen tiempos muy difíciles y hay mucha necesidad”.
Durante las primeras cuatro semanas, Banco de Alimentos de Nosara recogió 27 bolsas de arroz y 28 bolsas de frijoles, además de otros alimentos y artículos domésticos. “Hemos tenido una buena respuesta”, comentó Tarlow, observando que la Pastoral ya está poniendo a un lado algunos alimentos para ser distribuidos durante los meses más difíciles económicamente en septiembre y octubre. “Necesitamos que la gente continúe haciendo donaciones. El programa está funcionando”, aseguró.
Los recipientes para donaciones se encuentran en Súper La Paloma, Súper Vida y Súper Nosara. Se pide que los residentes de la zona donen uno o más artículos cada vez que compren en el supermercado. Los productos que siempre se necesitan son leche, jugo,, aceite de cocina, harina de maíz, arroz, frijoles, azúcar, latas de atún, jabón en polvo y en barra, productos de higiene femenina, papel higiénico y pañales para bebés.
El Banco de Alimentos también distribuirá artículos que los viajeros llevan a Nosara para donar. Hay mucha necesidad para sábanas usadas en buenas condiciones, juguetes de aprendizaje y ropa interior nueva para niños, según Tarlow. “Estoy esperando que la gente incluyan algunos de estos tipos de artículos en su maleta la próxima vez que visitan”, dijo.
Para obtener más información sobre el Banco de Alimentos, contacte a Linda Tarlow: [email protected]. Además, la Pastoral Social tiene una cuenta en el Banco Costa Rica para recibir donaciones para ayudar a las familias con la compra de medicamentos y transporte al hospital, el número de cuenta es 001-0306665-7.
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