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Las calles de Nicoya se llenaron de color y tradición en el desfile de estampas típicas.
Niños y jóvenes de varias instituciones desfilaron orgullosos de sus tradiciones.
La escuela San Martín quiso hacer mención del legado Chorotega en su desfile.
Algunos jóvenes aprovecharon para crear conciencia sobre el problema del dengue.
Las mascaradas no podían faltar en el desfile.
Gran parte del público fueron estudiantes de los mismos colegios.
El calor obligaba a los percusionistas a hidratarse constantemente.
Muchos disfrutaron de chorreadas durante el desfile.
Los adultos mayores también se sumaron al desfile.
Adultos y niños disfrutaron del evento.
Este joven impresionó a los presentes con su destreza al hacer girar el tambor con su cuello y lanzarlo por los aires en varias ocasiones mientras desfilaba.
El C.T.P. de Nicoya deleitó al público con una gran demostración de bailes típicos.
Algunos jóvenes disfrazados interactuaban con el público.
El desfile terminó frente a la iglesia de San Blas.
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