Luis Carlos Huertas recuerda que cuando buceó en las Islas Murciélago el 8 de febrero anterior el agua estaba muy verdosa, turbia y con mucha corriente.
Huertas es instructor de buceo, tiene su propia empresa llamada Seakret Divers y además es médico de profesión.
Por su bagaje, los miembros de una tripulación lo llamaron al día siguiente cuando un tiburón toro mordió a una turista de nacionalidad inglesa mientras buceaba en ese mismo sector del Área de Conservación Guanacaste (ACG), donde él había estado el día anterior.
Una corriente marina la empujó hacia donde nadaba un tiburón. El animal, al verla venir de pronto, se defendió mordiéndola.
¿Es usual que esa sea la reacción de los tiburones al toparse con buceadores? ¿Qué condiciones hacen un área apta para bucear con esos animales?
La Voz de Guanacaste le consultó a Huertas, que conoció de cerca el caso, y a otro experto qué hay que tener en cuenta para minimizar los riesgos cuando buscamos en las costas de la provincia.
El gran susto
El punto de buceo donde ocurrió el incidente es conocido como “Big scare” o “El gran susto” y es uno de los más alejados de las islas Murciélago. Es una zona famosa a nivel nacional e internacional en el gremio de buceadores porque abundan los tiburones toro. La temperatura y turbiedad del agua la hace la zona ideal para cazar y reproducirse.
Es el punto más alejado y desprotegido de la costa, por lo que está más expuesto a corrientes, explica el profesor de biología e investigador del Centro de Investigación en Ciencias del Mar y la Limnología, Mario Espinoza.
Por eso, para Espinoza este no es una buena época para bucear allí. Desde su punto de vista es mejor hacerlo entre los meses de mayo y octubre.
“Cuando empiezan a pegar los vientos a partir de noviembre, diciembre y enero, las condiciones cambian. La navegación se vuelve más peligrosa, el oleaje, el viento y las corrientes hacen que haya más partículas en el ambiente y eso hace que la visibilidad cambie y que las condiciones para el buceo no sean óptimas”, explica.
También detalla que la temperatura disminuye porque con los vientos alisios ocurre un fenómeno que se llama afloramiento costero. El viento desplaza el agua superficial y hace que la de la profundidad, que viene fría y cargada en nutrientes y sedimentos, ascienda a la superficie. Eso provoca que se enfríe mucho.
Estamos hablando que estos son los meses más peligrosos para la navegación en el Pacífico Norte, y las condiciones para el buceo no son tan agradables”, añade.
Por eso recomienda que durante esta época, buceen en esa zona quienes tengan más experiencia, no sólo con corrientes sino también con tiburones.
Huertas, de Seakret Divers, considera que las áreas como Flamingo, Playas del Coco o el golfo de Santa Elena son ideales para bucear en esta época, pues están más cerca de la costa y tienen corrientes manejables y están más protegidas de los vientos.
¿Te gustaría bucear responsablemente en Guanacaste? Estas son algunas consideraciones que ambos expertos recomiendan:
- Buceá con grupos pequeños de seis personas y el instructor. Al bucear con tiburones no es apropiado ir con grupos grandes, esto podría ahuyentarlos o estresarlos. Si son más personas, es importante tener otro guía de seguridad.
- Nunca acorralés a un animal. Siempre dale espacio y una ruta de salida ya que están en constante movimiento.
- Explicale a tu instructor cuál es tu nivel de capacitación. Decile cuántos buceos has hecho y dónde has buceado para que tenga una idea de dónde has experimentado y a qué condiciones te has sometido.
- No toqués a los animales marinos. Si perseguís un animal para tocarlo podría atacarte como acción defensiva.
- No buceés delante del guía.
- No te separés del grupo.
- Acatá las medidas de seguridad y procedimientos.
- Si te perdés, ascendé despacio, con calma, separado de la piedra y al estar en superficie esperá que el barco te recoja.
Los turistas no son los únicos responsables de su seguridad cuando hacen un buceo, por eso también les preguntamos qué deberían exigir de un guía de buceo:
- El buceo es un proceso. Los instructores no deben someter a sus estudiantes fuera de sus niveles de entrenamiento.
- Un guía debe anticiparse ante las condiciones del ambiente. Eso evitará que exponga a las personas que está llevando a alguna mala experiencia.
- Debe expresar claramente los riesgos que existen y reforzar la seguridad. Al entrar al hábitat de un animal existe el riesgo de que reaccione de una forma impredecible o que pueda tener un comportamiento un poco agresivo.
- Debe reconocer los signos de estrés de un animal.
- Debe ofrecer información previa sobre el sitio dónde van a bucear, qué tan profundo es el sitio, si hay corrientes submarinas y cuál es la temperatura.
- Debe verificar las regulaciones de cada área de buceo. Islas Murciélago es un Área Silvestre Protegida, por lo tanto los tour operadores deben registrarse y pagar su entrada.
Bucear sin mitos
Huertas explica que la población tiene estigmas alrededor de los tiburones y que a través de la historia se le ha satanizado.
“Nuestra cultura tiene mitificado al tiburón como un animal que persigue sangre, un animal sediento por atacar, que cuando ve un ser humano lo quiere morder y eso no es cierto”, asegura.
Señala que en la mayoría de ocasiones en que un tiburón muerde a una persona lo que ocurre es “una confusión de identidad”. Es decir, el animal muerde a una persona cuando asume que es una de sus presas habituales, pero al darse cuenta de que no lo es, se aleja.
El tiburón se comporta en su forma natural en su estado silvestre. Nosotros somos los visitantes y tenemos que respetar eso”, enfatiza.
Huertas refuerza la importancia de que las y los buceadores se entrenen también en primeros auxilios y en Rescue Diver, un curso que capacita en las emergencias que pueden ocurrir durante el buceo con tiburones y cómo enfrentarlas.
Según el médico y buzo, la turista inglesa que el tiburón mordió visita el país varias veces al año para bucear y conoce muy bien la zona. El accidente pudo ser mucho más grave si no fuera por la gran cantidad de buceos y su experiencia de ella nadando con tiburones.
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